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Aruba tiene sabor a hallaca en Navidad
Posted by Mairim Gómez Cañas
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domingo, diciembre 13, 2009
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Placeres viajeros
En diciembre los venezolanos buscan dos cosas: playa y familia. Si pueden combinar ambas y además hacer compras, todavía mejor
En la placa de los automóviles y en cada rincón de Aruba se lee una consigna tan sencilla como cierta: “una isla feliz”. Imposible llevarle la contraria a esta ley de la alegría. Son 180 kilómetros cuadrados donde se conjugan sol, diversión y suculentas tiendas para tener un supremo Niño Jesús y recibir el año 2010 de manera exquisita. Lo mejor: todo a poco más de media hora de vuelo.
Es como estar en casa, pero con menos agobios. Sin tráfico que atormente ni demás yerbas caraqueñas. Al igual que los venezolanos, los habitantes de la isla gustan de estar en familia esos días. En la mesa, no falta la tradicional hallaca (ayaca, en papiamento) y un buen “Ponchi Crema”, pues nuestro menú decembrino, junto con las arepas, se coló en el gusto de los nativos. La gaita arubana -que seguro les recordará la nuestra- acompaña la Navidad y, en Año Nuevo, el Dande alegra las calles.
Su nombre proviene de la palabra Dandara del Papiamento que significa deleite o pasar un buen rato. Un grupo de cinco o más personas acompañan a un cantante que va de puerta en puerta manifestando sus mejores deseos con canciones donde se repite en cada frase "ai nobe"(año nuevo). A la medianoche, se lanzan fuegos artificiales para alejar a los malos espíritus.
Siempre hay algo que hacer. Durante el día, hay playas como Palm Beach que, aunque compartida por los grandes resorts, es de acceso público como el resto de los balnearios de Aruba. Allí los padres pueden gozar de total tranquilidad por la serenidad de sus aguas perfecta para los niños, mientras disfrutan de un refrescante coctel en cualquiera de los restaurantes que se encuentran a la orilla del mar.
Si están dispuestos a la aventura, ¡bon bini! Un recorrido en Jeep junto a toda la familia, escuchando música y anécdotas de los guías los llevará a descubrir las ruinas de una vieja mina de oro, una piscina natural entre las rocas, una granja de avestruces y cuevas donde permanecen silenciosas las huellas de los primeros pobladores de la isla, los indios Arawacs, todo enclavado en un desértico paisaje.
Pero si no quieren abandonar el océano ni un solo minuto, hay paseos en catamarán para disfrutar de las cristalinas aguas arubanas, donde la visibilidad puede llegar hasta los 30 metros de profundidad. ¿Qué pueden ver? Pues desde barcos hundidos hasta peces loro. Y si de visitar el fondo del mar se trata, hay una atracción especial: el submarino Atlantis, un paseo de hora y media entre corales, fauna y flora acuática. Para los más grandes, que buscan más adrenalina, disciplinas como el parasailing y el kitesurfing cuentan con el viento eterno de la isla a su favor.
Durante la noche, discos y bares como Mr. Jazz, local del conocido músico cubano Chucho Valdés, son ideales para los que desean bailar ritmos latinos. Para gustos más tranquilos está Los Sopranos, con agradable música anglo, y para los más jóvenes hay bares en la playa como Bugaloo o Moomba donde no falta el reggaeton. Los aficionados a los placeres lúdicos cuentan con casinos como el Stellaris, abierto las 24 horas.
San Nicolás habla papiamento. A preparar tarjetas. Oranjestad, la capital de Aruba, es linda, segura y, vista con ojos de comprador, un colorido centro comercial. En el down town encontrarán las más exclusivas firmas, perfumerías duty free, joyerías, bodegones y un mercado de artesanías y souvenirs donde siempre es rico curiosear.
Muy cerca de la zona hotelera está el Paseo Herencia, un mall con una buena selección de tiendas que permanecen abiertas hasta las 9 de la noche, incluso los domingos. En el centro cierran a las 6 de la tarde. ¿Recomendaciones? En perfumes, Aruba es la delicia al igual que su vecina Curazao. Los lentes de sol también se consiguen a muy buen precio. Las mujeres no dejen de probar los productos de aloe hechos en la isla. Un dato: en el aeropuerto se consiguen más baratos.
Descanso de lujo a precio especial. El recién remodelado Marriott Aruba Resort & “Stellaris” Casino tiene una oferta exclusiva para los habitantes de este lado del continente. Del 23 de diciembre al 2 de enero, la tarifa va desde 440 dólares aproximadamente por noche por habitación.
Todos sus restaurantes ofrecerán un menú especial para Navidad y el 31 de diciembre se realizará una fiesta de Año Nuevo en la playa, donde en medio de la arena, el cielo y el sonido del mar, tendrán una banda local tocando en vivo. A la medianoche el brindis y un show de fuegos artificiales.
Vía aérea
• Avior tiene tres vuelos por semana saliendo de Caracas y Valencia
• La Venezolana vuela todos los días desde Caracas y Maracaibo
• Varig (Sao Paulo vía caracas) vuela los domingos
Es como estar en casa, pero con menos agobios. Sin tráfico que atormente ni demás yerbas caraqueñas. Al igual que los venezolanos, los habitantes de la isla gustan de estar en familia esos días. En la mesa, no falta la tradicional hallaca (ayaca, en papiamento) y un buen “Ponchi Crema”, pues nuestro menú decembrino, junto con las arepas, se coló en el gusto de los nativos. La gaita arubana -que seguro les recordará la nuestra- acompaña la Navidad y, en Año Nuevo, el Dande alegra las calles.
Su nombre proviene de la palabra Dandara del Papiamento que significa deleite o pasar un buen rato. Un grupo de cinco o más personas acompañan a un cantante que va de puerta en puerta manifestando sus mejores deseos con canciones donde se repite en cada frase "ai nobe"(año nuevo). A la medianoche, se lanzan fuegos artificiales para alejar a los malos espíritus.
Siempre hay algo que hacer. Durante el día, hay playas como Palm Beach que, aunque compartida por los grandes resorts, es de acceso público como el resto de los balnearios de Aruba. Allí los padres pueden gozar de total tranquilidad por la serenidad de sus aguas perfecta para los niños, mientras disfrutan de un refrescante coctel en cualquiera de los restaurantes que se encuentran a la orilla del mar.
Si están dispuestos a la aventura, ¡bon bini! Un recorrido en Jeep junto a toda la familia, escuchando música y anécdotas de los guías los llevará a descubrir las ruinas de una vieja mina de oro, una piscina natural entre las rocas, una granja de avestruces y cuevas donde permanecen silenciosas las huellas de los primeros pobladores de la isla, los indios Arawacs, todo enclavado en un desértico paisaje.
Pero si no quieren abandonar el océano ni un solo minuto, hay paseos en catamarán para disfrutar de las cristalinas aguas arubanas, donde la visibilidad puede llegar hasta los 30 metros de profundidad. ¿Qué pueden ver? Pues desde barcos hundidos hasta peces loro. Y si de visitar el fondo del mar se trata, hay una atracción especial: el submarino Atlantis, un paseo de hora y media entre corales, fauna y flora acuática. Para los más grandes, que buscan más adrenalina, disciplinas como el parasailing y el kitesurfing cuentan con el viento eterno de la isla a su favor.
Durante la noche, discos y bares como Mr. Jazz, local del conocido músico cubano Chucho Valdés, son ideales para los que desean bailar ritmos latinos. Para gustos más tranquilos está Los Sopranos, con agradable música anglo, y para los más jóvenes hay bares en la playa como Bugaloo o Moomba donde no falta el reggaeton. Los aficionados a los placeres lúdicos cuentan con casinos como el Stellaris, abierto las 24 horas.
San Nicolás habla papiamento. A preparar tarjetas. Oranjestad, la capital de Aruba, es linda, segura y, vista con ojos de comprador, un colorido centro comercial. En el down town encontrarán las más exclusivas firmas, perfumerías duty free, joyerías, bodegones y un mercado de artesanías y souvenirs donde siempre es rico curiosear.
Muy cerca de la zona hotelera está el Paseo Herencia, un mall con una buena selección de tiendas que permanecen abiertas hasta las 9 de la noche, incluso los domingos. En el centro cierran a las 6 de la tarde. ¿Recomendaciones? En perfumes, Aruba es la delicia al igual que su vecina Curazao. Los lentes de sol también se consiguen a muy buen precio. Las mujeres no dejen de probar los productos de aloe hechos en la isla. Un dato: en el aeropuerto se consiguen más baratos.
Descanso de lujo a precio especial. El recién remodelado Marriott Aruba Resort & “Stellaris” Casino tiene una oferta exclusiva para los habitantes de este lado del continente. Del 23 de diciembre al 2 de enero, la tarifa va desde 440 dólares aproximadamente por noche por habitación.
Todos sus restaurantes ofrecerán un menú especial para Navidad y el 31 de diciembre se realizará una fiesta de Año Nuevo en la playa, donde en medio de la arena, el cielo y el sonido del mar, tendrán una banda local tocando en vivo. A la medianoche el brindis y un show de fuegos artificiales.
Vía aérea
• Avior tiene tres vuelos por semana saliendo de Caracas y Valencia
• La Venezolana vuela todos los días desde Caracas y Maracaibo
• Varig (Sao Paulo vía caracas) vuela los domingos
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